Hay países en el mundo que son verdaderos expertos en inculcar a los viajeros sus culturas y tradiciones. Sitios que cuentan con un encanto especial y donde se esfuerzan enormemente por dar a conocer a los visitantes toda su autenticidad. Es el caso de México, un país que mira especialmente por ofrecer experiencias únicas en lugares únicos. ¿Y cómo lo hace? A través de sus vibrantes Pueblos Mágicos. Destinos encantadores que encapsulan la rica historia y cultura del país. Por eso son mucho más que simples destinos turísticos. Son lugares donde la historia y la cultura, además de entrelazarse, permanecen latentes con el paso del tiempo.
Los Pueblos Mágicos, con sus símbolos y leyendas, son reconocidos por el propio gobierno mexicano como lugares especiales. Su belleza, tradiciones arraigadas y su capacidad para transportar a los visitantes a tiempos pasados son sus mayores bazas con las que cautivar a todo aquel que recorre sus calles. Actualmente, son 132 Pueblos Mágicos los que tiene México nombrados como tales. Cada uno de ellos bien merecería su propia publicación. Sin embargo, para que conozcas un poquito más la magnitud del legado propio que albergan, te presentaremos tres a continuación.
Malinalco, un pueblo mágico cargado de historia
Ubicado en el Estado de México se encuentra Malinalco. Un tesoro escondido que te transportará a un mundo lleno de historia y tradiciones. Su hermoso entorno natural, con montañas escarpadas y exuberante vegetación, crea un escenario impresionante para explorar. Podrás maravillarte con las ruinas arqueológicas resguardadas en el ‘Cerro de los Ídolos’, un sitio sagrado donde las antiguas civilizaciones matlazinca y azteca dejaron su legado, antes de la llegada de los españoles. Sumérgete en la fascinante historia de este pintoresco pueblo visitando el Museo Luis Mario Schneider, que alberga una valiosa colección de arte prehispánico y colonial.
Además, podrás disfrutar de la deliciosa gastronomía local. Para los más ‘precavidos’, nada como unos tacos de cecina con chorizo o trucha a la Malinalco. Auténticos sabores mexicanos. Ahora bien, si eres un atrevido culinario, no dudes en probar otros platos locales como el caldo de iguana o los tamales de rana, elaborados con tiritas de nopal, cebolla, patatas fritas y una exquisita salsa molcajeteada de tres chiles.
Aunque si de algo puede presumir Malinalco es de sencillez. ¿Por qué decimos esto? Basta con dar un paseo por sus coloridas calles empedradas y admirar la arquitectura colonial que las embellece. Eso también es sacarle el máximo partido a este pueblo. Un refugio perfecto si quieres escapar de la rutina y sumergirte en un ambiente tranquilo y lleno de inspiraciones. Con lugares espirituales, símbolos de la profundad religiosidad que impera en la región, como la Capilla de Santa Mónica, la Parroquia del Divino Salvador o el Santuario del Señor de Chalma. Sitios sencillos; en la línea de lo que es el Malinalco y de lo que destilan sus paisajes.
Bernal y el tesoro de su Peña
Uno de los Pueblos Mágicos más cautivadores de México no es otro que Bernal. Ubicado en el Estado de Querétaro, se trata de un encantador destino que te transportará a un mundo lleno de historia, tradición y belleza natural. Lo primero que te dejará maravillado será su majestuoso monolito, el tercero más grande del mundo: la Peña de Bernal. Su imponencia rocosa y su energía ancestral te transportarán a las antiguas ceremonias prehispánicas. El sonido de los huehuetls y el olor de la hierba en el ambiente terminará por completar esta mágica experiencia en las alturas.
Aparte, este impresionante monolito te llamará la atención si eres un amante de la aventura y la naturaleza, pues ofrece senderos y cascadas para explorar los alrededores la Peña. Por lo tanto, podrás disfrutar de caminatas, escaladas y actividades al aire libre en un entorno natural impresionante. Y, por supuesto, de las increíbles vistas panorámicas que se ven desde su cima.
Además de la fascinante Peña de Bernal, el pueblo en sí te cautivará con su encanto colonial. Sus calles empedradas, casas coloridas y fachadas adornadas con flores crean un ambiente pintoresco y acogedor. Explora la plaza principal y admira el Templo de San Sebastián Mártir, un tesoro arquitectónico que data del siglo XVII. Y cómo olvidar las delicias gastronómicas de Bernal. Un lugar reconocido por el sabor auténtico de sus gorditas martajadas o de maíz quebrado, acompañadas de salsa de molcajete, pero también por sus exquisitos dulces. Para muestra, las natillas o la tradicional nieve (helado) de guamiche. En definitiva, platillos sabrosos y muy mexicanos que forman parte de la tradición propia de este sorprendente pueblo.
La atmósfera especial de Tequisquiapan
Tampoco puedes perderte el encanto particular de Tequisquiapan. Ubicado también en el Estado de Querétaro, este lugar es reconocido por su rica historia y su arquitectura colonial. Dos señas que te transportarán a una época pasada llena de tradición y autenticidad. Nada más llegar, sus calles empedradas te invitan a dar tranquilos paseos mientras admiras las fachadas coloridas y los balcones adornados con flores. La imponente Parroquia de Santa María de la Asunción será uno de los monumentos que más capten tu atención. Una joya arquitectónica barroca del siglo XVIII que te cautivará. Además, se encuentra en una ubicación privilegiada. Nada más y nada menos que en la Plaza Miguel Hidalgo, el corazón del pueblo, repleta de restaurantes y tiendas donde podrás saborear la deliciosa gastronomía local y adquirir artesanías típicas. Aunque para ello, no muy lejos de esta emblemática plaza, también dispondrás del pintoresco Mercado Telesforo Trejo.
Eso sí, además de sus calles y monumentos, Tequisquiapan tiene dos señas de identidad por excelencia: el queso y el vino. Si eres un amante de la gastronomía puedes ir frotándote las manos… ¡Aquí está la sede de la Feria del Queso y el Vino! Un tradicional festival donde se exponen estos deliciosos productos, reconocido en todo Querétaro y celebrado durante los fines de semana de mayo y junio.
Y si tu objetivo es relajarte, no encontrarás un lugar mejor. En Tequisquiapan encontrarás aguas termales que brotan de las entrañas del pueblo para brindarte esos momentos que tanto necesitas de tranquilidad y bienestar. En definitiva, por todo lo que alberga y tiene para ofrecerte, este pueblo mágico es sin duda un destino de lo más versátil. La historia, cultura, gastronomía y bienestar se combinan en una sola manera de disfrutar. Una atmósfera única en la que desearás adentrarte y no salir.
Poco más que añadir. Malinalco, Bernal y Tequisquiapan son tres Pueblos Mágicos de México que te transportarán a mundos encantadores llenos de historia, cultura y belleza natural. Desde las imponentes ruinas arqueológicas de Malinalco, pasando por el icónico monolito de Bernal hasta el ambiente vinícola de Tequisquiapan. Por descontado, estos destinos tienen algo especial para cada viajero. Además, te invitan a explorar y sumergirte en la esencia de este hermoso país. Solo hay que dejarse envolver por su ambiente, su encanto y su tradición. Todo lo demás, fluirá solo. Experiencias inolvidables y momentos mágicos con los que descubrir la autenticidad de México y sus pueblos.